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Article: “Siempre estoy pendiente de lo que hace en Internet… ¿Estoy exagerando?" Cómo acompañar a tus hijos en la era digital

“Siempre estoy pendiente de lo que hace en Internet… ¿Estoy exagerando?" Cómo acompañar a tus hijos en la era digital

“Siempre estoy pendiente de lo que hace en Internet… ¿Estoy exagerando?" Cómo acompañar a tus hijos en la era digital

Sé que te preocupa

Si eres padre o madre, probablemente sientes una alerta constante. Cada notificación, cada mensaje, cada juego online puede generar miedo: “¿Está bien? ¿Se está exponiendo demasiado? ¿Podría pasarle algo?”.

Quiero que sepas algo: no estás exagerando. Esa preocupación es natural y refleja tu amor y tu responsabilidad. Los peligros en Internet existen: ciberacoso, desconocidos que buscan aprovecharse de los más pequeños, contenidos inapropiados… y todo esto puede hacer que cualquier adulto se sienta inseguro.

Pero aquí está la clave: muchos de los riesgos no vienen solo del exterior, sino de cómo usamos y equilibramos la tecnología en casa. No se trata solo de vigilar, sino de acompañar.

Internet: un mundo de oportunidades y riesgos

Sabemos que Internet ofrece infinitas posibilidades: aprender, crear, comunicarse y divertirse. Pero si el uso no está acompañado ni regulado, puede convertirse en una fuente de ansiedad, dependencia o frustración.

Algunos de los efectos que se observan en consulta son:

  • Niños que se irritan si se les retira el dispositivo.
  • Dependencia de “likes” o validación online para sentirse aceptados.
  • Dificultad para desconectar y disfrutar de otras actividades.
  • Interés por contenidos que no están preparados para procesar emocionalmente.

El problema no es la tecnología en sí, sino cómo se integra en la vida diaria. Sin límites, rutinas ni acompañamiento, los dispositivos dejan de ser herramientas y se convierten en una fuente de conflicto y preocupación.

Estrategias para acompañar sin agobiar

  1. Valida tu preocupación. Sentirse alerta es normal. Reconocer tus emociones te permite conectar mejor con tu hijo y guiarlo sin culpa.
  2. Establece normas claras y coherentes. Los niños necesitan saber cuándo, cómo y para qué usar la tecnología. La coherencia genera seguridad y evita discusiones continuas.
  3. Comparte su navegación. Explorar contenidos juntos y comentarlos fortalece la reflexión crítica y el vínculo familiar.
  4. Fomenta el pensamiento crítico y la autonomía. Ayúdales a distinguir lo real de lo manipulado, lo público de lo privado, y a tomar decisiones conscientes online.
  5. Crea espacios sin pantallas. Las comidas, los juegos familiares o la hora de dormir deberían ser momentos libres de dispositivos.
  6. No uses la tecnología como calmante emocional. El móvil o la tablet no deben sustituir la gestión de emociones. Ayúdales a tolerar el aburrimiento, la frustración y la espera.

En resumen

Proteger a tus hijos en Internet no significa controlar cada movimiento, sino acompañarlos, educarlos y enseñarles a usar la tecnología con equilibrio y sentido.

Cuando los padres comprenden que los peligros no solo vienen de fuera, sino también del uso desordenado o excesivo, la preocupación puede transformarse en acciones concretas que fomenten autonomía, seguridad y bienestar emocional.

Internet no tiene por qué ser una fuente de ansiedad. Con acompañamiento, límites claros y diálogo constante, puedes enseñar a tus hijos a conectar con el mundo digital de manera segura, responsable y saludable.